Quemados políticos y reyes, pero no diosas
Ayer por la noche se quemaron las Fallas, que para eso se hacen. Unas fallas con algo menos de monumentalidad, pero con mucho más crítica que se la ganaron los políticos por fastidiar a la fiesta con medidas como el 21% de IVA al monumento, protesta que estaba hasta en la sopa estos días. También hubo alguna que otra anécdota, como que no se quemara todo el remate de Ceramista Ros, que representaba dioses de la India (aunque casi se quema un hindú de verdad), o que una fallera mayor cogiera su regalo de la falla con una plataforma elevadora. El caso es que la cremà terminó con las Fallas 2013, y hoy solo quedan por las calles churrerías cerradas, alguna carpa que otra y suciedad.




Així va vore’s el president de Junta Central Fallera, Francisco Lledó anit, en la famosa Assemblea Extraordinària de Presidents per a parlar del canvi de dia de la cremà: de vegades eixia el seu costat faller, i de vegades el polític. Com a conclusió, que la urna per a votar este tema ni es va estrenar (no serviria per a molt, perquè la Generalitat continua cabuda en canviar-lo), i que l’IVA dels monuments fallers continuarà en el 21%. És a dir, Mister Hydelpepé, el polític, guanya a Doctor Lledokyll, el faller.