El cielo de la Falla Sueca – Literato Azorín se llenará de estrellas aunque esté nublado, iluminando el camino de la falla que surgió del barro (literalmente).

Unas estrellas tridimensionales iluminarán las calles de Sueca – Literato Azorín, según el proyecto con el nombre “Camino” creado expresamente para la comisión por Porgesa, la nueva empresa de iluminación. Unas luces que acompañarán la falla de lema Reset creada en el taller de Pedro Santaeulalia, la cual se ha convertido en un símbolo de superación tras reconstruirse después de sufrir la DANA de octubre. Artista que, por cierto, volverá a plantar en la demarcación en 2026.
Ese ha sido un pequeño resumen de un acto que empezó con algo no habitual, una entrega de reconocimientos a diversas entidades que prestaron su ayuda a las personas que padecieron las inundaciones de l’Horta Sud. Los galardonados fueron los voluntarios de la Cantina de Russafa, la Federació de Falles de 1a A, el diario Levante-EMV, Onda Cero, la Casa de la Caridad, el Gremio de Artistas Falleros de València, el Consorcio Provincial de Bomberos de València, la Policía Local de Benetússer, la Guardia Civil de la Comunitat Valenciana, la Unidad Militar de Emergencias y la Comandancia Militar de València y Castelló.

Posteriormente se volvió a llamar al representante de la Casa de la Caridad, a quien se le entregó una donación de 1.000 euros. La comisión fallera lleva más de 60 años colaborando con esta antigua organización benéfica valenciana.
A continuación se procedió a presentar el proyecto de iluminación. Este año debuta con Sueca – Literato Azorín una empresa de Puente Genil (Córdoba), Porgesa, que montará un proyecto titulado “Camino” con luces creadas a propósito para la comisión. Serán 25 arcos introducidos por una portada de 18 metros de alto, con un diseño basado en estrellas tridimensionales que contendrá unas 500.000 bombillas. Su inauguración será el próximo viernes, 7 de marzo, a las 19.45 horas.

Después fue el turno del artista de la falla infantil, Rubén Arcos, quien explicó su proyecto El jardí d’olors valencians como basado en la pregunta: ¿a qué huele València? Por ello, en sus escenas habrá referencias a los olores a pólvora, a flores, a naranja, a la cremà, a paella, a azahar, a fuegos artificiales y otros. La falla tendrá su riesgo en la estructura, ya que toda ella se aguantará con el tallo de una flor. El proyecto participará en la sección primera de Junta Central Fallera.

Finalmente se explicó la falla grande, que se calificó como un ejemplo de superación. En efecto, el taller donde se fabricaba se inundó como consecuencia de la pasada DANA, dejando en mal estado todas las piezas de la falla que había terminadas o en curso. Tras mucho trabajo y la ayuda de falleros y falleras de Sueca, el local de Pedro Santaeulalia se limpió de barro y se pudo reconstruir la falla, que pudo terminarse al 100%. No obstante, cerca de ella se situarán piezas estropeadas por el barro, para que el público se haga una idea de la magnitud de la tragedia que sufrió el catafalco.
La falla contendrá la figura más alta de todas las que se planten en València, con 19 metros, y que será un tronco humanizado. Según uno de sus guionistas, Ángel Romero, el argumento de esta falla se basa en la idea de que el planeta se harta de todos los problemas que le causa la Humanidad, por lo que el núcleo emerge y aprieta el botón de reset para reiniciarse. En ese reinicio aparecen el mar y la tierra, acompañados del Sol, la Luna y unos seres llamados Elementales, para que la Naturaleza tome el control de la situación, relegando al ser humano a estar a merced de las fuerzas naturales. Dentro de esta crítica a la actuación humana que perjudica al planeta habrá escenas divertidas pensadas por el propio artista Pedro Santaeulalia y el también artista (y copresidente de la comisión) Juanjo García. El guion, que estaba pensado desde hace tiempo, prácticamente resultó profético de la trágica manifestación de la Naturaleza que se dio en la comarca de l’Horta Sud.


Tras presentarse el proyecto, la comisión anunció que renueva contrato con Pedro Santaeulalia, por lo que plantará también la falla en 2026. De Rubén Arcos aún no lo han decidido, ya que tienen que hacerle un “examen” de lo que plante en Fallas, dándose la circunstancia de que es la primera vez que trabaja en esta demarcación.
