Fallas para falleros y no falleros según Candreu
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UNESCO, acuérdate de lo nuestro

Todo el mundo, hasta el gato, estuvo convocado para recordarle a la UNESCO que a las Fallas les haría mucha ilusión ser Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.  Y hasta la bandera se llenó la Lonja para ella, y para presentar un libro y una web que hagan un poquito más de fuerza.

Apoyo a la candidatura de las Fallas a Patrimonio Cultural Inmaterial.

Un edificio patrimonio de la Humanidad, la Lonja de la Seda, fue el marco donde se dieron cita falleros, amigos de las Fallas y simplemente personas que quisieron apoyar la candidatura de esta fiesta a ser Patrimonio Cultural de la Humanidad. Ya queda poco -el 2 de diciembre es el día- para que se sepa si finalmente la UNESCO dará el sí a esta petición, pero para no ir perdiendo el tiempo Junta Central Fallera va moviendo ficha y haciendo méritos para animar a que la respuesta sea positiva.

Y para convencer a la UNESCO qué mejor recordar que lo grande de las Fallas es su entramado social. Por eso ayer el concejal de Cultura Festiva del Ayuntamiento de Valencia, Pere Fuset, recordaba a los valencianos que esta fiesta en un patrimonio en común para ellos, destacando además el trabajo de los falleros y la transmisión de padres a hijos de esta tradición.

En el acto también se presentó un libro con el título de Falles, un patrimoni en comú, con numerosas imágenes de la fiesta realizadas por fotógrafos como Antonio Cortés, Xavier Serra y Ángel Romero, y una web que se encuentra la dirección fallespatrimonicomu.info escrita en castellano, valenciano e inglés. En ambos casos se pretende difundir el valor patrimonial de las Fallas, en especial aquellos aspectos que la UNESCO valora para que conceda la condición de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.

Por otro lado, también se comentó ayer que si finalmente el 2 de diciembre las Fallas consiguen esta valoración internacional, está previsto que dos días después haya una fiesta para celebrarlo. Sería el final de un sueño que la Associació d’Estudis Fallers, una de las impulsoras de la candidatura y que contó con algunos de sus miembros en la redacción del expediente, tiene desde hace años.