La revista más atípica del panorama fallero ya está a la venta. Falla Crítica, ya un clásico entre los malalts de falles, este año ha querido ampliar horizontes y ofrecer contenidos que interesen a un público más mayoritario. Para empezar, en la portada aparecen todos los colaboradores desnudos, algo que es digno de ver por las pintas que nos han puesto a algunos.
En efecto, aparte de secciones habituales como las opiniones de treinta críticos sobre la sección especial y otros monumentos, se publican nada menos que 400 fotos de fallas. Además, se publican 62 fotos seleccionadas entre las participantes al Primer Concurso de Fotografías Falleras de Ingenio y Gracia, entre las que se encuentran las ganadoras (primer premio ex aequo para las de Antonio Cortés y Segundo Gómez-Abril, segundo para la de Gabriel Guiñón y tercero para la foto de un servidor). También hay nuevas secciones como las diez fallas candidatas a la mejor de la historia y artículos de opinión.
Los criticones de la publicación han opinado, en general, que Nou Campanar ha sido la mejor falla del año, mientras que Convento Jerusalén resultó la más artística. El título de artista revelación se lo ha llevado José Lafarga, autor del monumento de San Vicente-Periodista Azzati, el cual es además “la falla descoberta” de 2008. La más innovadora y original, por su parte, ha sido la falca de la Falla Corona, creación de Alfredo Ruiz.
De la revista, resulta especialmente divertida la sección del concurso fotográfico, y no lo digo porque salga una foto hecha por mí, que es esta:
Se titula “En la plantà, unos trabajan y otros se tocan las narices”, y simboliza lo que pasa en la mayoría de las plantàs de los monumentos: unos lo montan, y otros se toman cervezas en la barra de la carpa. Con esta fotito me he llevado el tercer premio del concurso, lo cual me pone muy contento, porque nunca me había llevado ningún premio de fotografía.
